Envejecimiento y Fuerza Muscular

El desgaste de la función y fuerza muscular con el pasar de los años, es una de los principales factores que predominan en la disminución de la capacidad de vida independiente de todas las personas. La fuerza principal o máxima y explosiva son fundamentales para poder realizar muchas tareas de la vida cotidiana, por ejemplo; subir escaleras, levantarse de una silla o una cama, desplazarse o pasear. Igualmente, se cree que la disminución con la edad de la capacidad del sistema Neuro-muscular para generar fuerza aumenta el riesgo de caídas y resbalones, característico de este grupo de población, aspecto que nos lleva a considerar su valoración con mucho más interés. 
Además del envejecimiento, una de las circunstancias que mejor explican la disminución o reducción en la fuerza y la masa muscular con la edad, es la estricta reducción que se aprecia con el paso de los años en la cantidad y calidad de actividad física diariamente realizada. el resultado de todo este proceso, como si fuera más bien un ciclo, origina que en la medida que decrece la practica de actividad física diaria decae la fuerza y la masa muscular. La suspensión de este ciclo es de mucha importancia para el mantenimiento de la calidad de vida y la salud de las personas. el sistema Neuro-muscular en el hombre adquiere su plena madurez después de los 20 a 30 años de desarrollo. 


Entre las décadas tercera y quinta, la manifestación máxima de la fuerza permanece estable o con reducciones poco característico. Sin embargo, la mayoría de los autores indican que al llegar al pic. de los 60 años, comienza una etapa caracterizada por la reducción gradual de la fuerza máxima, que suele ser del orden del 30 a 40%. La disminución de la fuerza se mantiene constante hasta los 80 años de vida. A partir de esta edad se produce un aumento en la aceleración de la disminución de fuerza. 


Este proceso de envejecimiento se encontrará asociado no solamente con la reducción de la fuerza máxima, si no también con la disminución en la capacidad del sistema Neuro-muscular para producir la fuerza explosiva que mencionaba al comienzo del articulo. Esta disminución es inclusive más drástica que la apreciada en la producción de fuerza máxima para el mismo grupo o conjunto muscular, y llega a perder aproximadamente entre un 3 a un 3,5% de fuerza al año, entre los 65 y 84 años. La disminución de la fuerza con la edad se produce principalmente por una pérdida progresiva de la masa muscular o más bien llamado (sarcopenia), de manera que al manifestar la fuerza desarrollada por unidad de músculo el descenso de la fuerza en conjunto con la edad se reduce de manera muy notoria. Un índice de la masa muscular relativa, puede ser determinado a partir de la masa magra (Kg) dividiéndola por la superficie corporal al cuadrado (m2); se considera un índice de masa muscular relativa cuando esta relación expresa valores inferiores a 7,26 Kg x m2 en el hombre o de 5,45 kg x m2 en la mujer. Estos valores son observados en el 13,5% de los hombre y en el 8,8% de las mujeres a la edad de los 70 años.